El bloque del Senado del PJ-FpV presiona al Ejecutivo con su proyecto de emergencia laboral, pero desde el macrismo aseguran que «no hay ola de despidos» y que la desocupación es del 7%, «como en diciembre»
Jorge Triaca, ministro de Trabajo de la NaciónCrédito: Reuters
A pesar de la resistencia del Gobierno, el PJ-FpV intentará aprobar el próximo miércoles en el Senado un proyecto de ley que prohíbe los despidos por 180 días. Como respuesta, el ministro de Trabajo Jorge Triaca aseguró que «la situación» del país en materia de empleo «nada tiene que ver a una situación parecida a la de 2002«, cuando se sancionó una norma similar, y consideró que «hay una preocupación más teñida de una situación política que de una realidad».
«Sabemos que hay situaciones difíciles, pero las creemos muy focalizadas en el sector de la construcción«, destacó Triaca en declaraciones a radio Continental. En la misma línea se manifestó Nicolás Massot, jefe del bloque del oficialismo en Diputados, quien aseguró que «se habla mucho de una ola de despidos y de un crecimiento sensible del desempleo, pero nosotros no lo estamos verificando«.
«El único indicador confiable que tenemos, el del Ministerio de Trabajo, nos dice que (el desempleo) está apenas por encima del 7 por ciento, tal como estaba en diciembre pasado», agregó Massot en una entrevista con el diario La Nación.
El bloque peronista que encabeza Miguel Ángel Pichetto en el Senado tiene mayoría propia (42 legisladores), y está determinado a sesionar el próximo miércoles para aprobar el proyecto presentado en esa cámara. La iniciativa fue promovida por el pampeano Daniel Lovera, presidente de la Comisión de Trabajo, y tuvo dictamen el miércoles pasado con las firmas del PJ-FPV, del Frente Progresista y parte del interbloque Peronismo Federal.
La del Senado se trata de una de las propuestas impulsadas por la oposición en el Congreso: la otra está en laCámara Baja pero todavía no tiene dictamen de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, controlada por el oficialismo, y por lo tanto, con un camino legislativo más difícil de transitar.
La principal diferencia entre los dos proyectos es el plazo de prohibición de despidos en el sector público y privado: el de Diputados establece que debe ser hasta el 31 de diciembre de 2017 y retroactivo al 1 de marzo de este año; el del Senado suspende los despidos por 180 días.
A pesar de las divisiones internas dentro del bloque peronista en el Senado, por un lado se encuentran los peronistas moderados y por otro los kirchneristas, si votan unidos, con sus 42 senadores presentes, el proyectosería aprobado y remitido a la Cámara de Diputados sin inconvenientes.
Desde el oficialismo ya deslizaron la posibilidad de que el presidente Mauricio Macri vete la ley si es aprobada por el Congreso, en cuyo caso volvería al Parlamento. De acuerdo al artículo 83 de la Constitución Nacional, si una ley es vetada por el Poder Ejecutivo debe volver a la Cámara de su origen, que sólo puede anular el veto y ratificar el proyecto si lo hace con una mayoría de dos tercios, tras lo cual debe ir nuevamente a la Cámara revisora.
El jefe del bloque de diputados del FPV, Héctor Recalde, indicó el último viernes que otra alternativa que evalúan frente a un eventual veto presidencial es «denunciar el abuso de derecho«, porque «hay jurisprudencia en la Corte Suprema sobre la declaración de inconstitucionalidad de un veto».
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