Rodrigo Osorio (25) estaba desaparecido desde el domingo, cuando se lo vio por última vez en el lago Valle Grande. Tras una intensa búsqueda por tierra, aire y agua, las esperanzas de encontrarlo con vida se iban esfumando. Finalmente, este jueves en horas de la mañana, su cuerpo emergió y fue visto por los rescatistas.

El joven había ido a un retiro espiritual con compañeros de la Iglesia Vida y Paz que dirige el pastor Víctor Doroschuk a un camping del Cañón del Atuel y esa tarde fueron a bañarse al lago, donde fue la última vez que lo vieron. Desde entonces comenzó la búsqueda que incluyó buzos de bomberos, rastreo con canes y hasta un helicóptero, pero los intentos por dar con su paradero fueron inútiles. 

Finalmente, este jueves en horas de la mañana los rescatistas divisaron el cuerpo de Rodrigo a unos 70 metros de las playas de arena frente al Club de Pescadores, donde habían aparecido el lunes, los anteojos y una zapatilla.

Cabe decir que, según una de sus compañeras, “Rodrigo no sabía nadar”, a lo que hay que sumarle que en el lugar no hay guardavidas a pesar del gran número de visitantes que tiene el lugar todos los veranos.