Elisabetta Piqué, periodista de LA NACION y autora de la biografía del Sumo Pontífice en la que se basa el film, habla de cómo comenzó el proyecto cinematográfico protagonizado por Darío Grandinetti.

Me parece ayer cuando, en noviembre de 2013, me contactó el productor de cine Pablo Bossi. Nos encontramos en un bar de la avenida Santa Fe, donde me dijo que quería hacer una película sobre el Papa. Había quedado encantado con mi biografía, Francisco, vida y revolución , que acababa de publicarse, y me invitó a participar en el proyecto.

Al margen de mis coberturas de los festivales de cine de Venecia y Roma, para mí era algo totalmente nuevo. Más allá de los riesgos, no tuve dudas. Y enseguida acepté el desafío de convertirme en «script and shooting consultant» (consultora de guión y rodaje) de una película que para muchos, y sobre todo fuera de la Argentina, servirá para entender mejor qué hay detrás de esa figura enorme, ese líder y autoridad moral mundial que es hoy el papa Francisco.

Luego de reuniones en Roma y Madrid, e idas y venidas de guiones, en enero de 2014 conocí a Beda Docampo Feijóo, un nombre reconocido en el cine nacional. Con él enseguida hubo sintonía. Entendí que había captado la esencia del personaje luego de muchas conversaciones, charlas, paseos romanos, cafés. Y lo confirmé cuando, meses más tarde, leí el primer guión que escribió, en el cual, para contar la historia del padre Jorge, creó a una periodista que es mi virtual «alter ego» (la actriz española Silvia Abascal).

Meses más tarde conocí a Darío Grandinetti. El actor elegido para interpretar al Papa –apuesta difícil y riesgosa– viajó a Roma. Como buen profesional, antes de iniciar el rodaje, quería ver a Francisco de cerca, estudiarlo, analizar sus movimientos, algo que pudo hacer en una audiencia general de una fría mañana de diciembre. Volví a ver a Darío ya maquillado y vestido de cardenal en un lluvioso día de marzo, en plena filmación. Impactante ver cómo se había transformado en Jorge Bergoglio.

Francisco, el padre Jorge , la película, ya es una realidad. La adaptación del libro no podría ser mejor. Con grandes actores, gran fotografía y música, creo que refleja la esencia del padre Jorge y de su visión de Iglesia en estado de misión permanente, lista para salir a acompañar a los heridos de este mundo. Así, ayuda a entender por qué el primer papa latinamericano es como es y por qué está revolucionando a la Iglesia católica y teniendo semejante impacto en todo el mundo.