Dos nuevos casos de embarazo en pequeñas de 12 años de edad conmocionan al Valle de Uco. Una niña del distrito Villa Seca, en Tunuyán, cursa el séptimo mes de gestación, mientras que su padrastro –de 55 años- está detenido sospechado de abuso.
Por otro lado, el pasado lunes dio a luz en el hospital Scaravelli otra nena –de la misma edad- oriunda de Tupungato, la cual se cree habría sido violada por su cuñado.
Las noticias golpean a una semana de que trascendiera el caso de la pequeña de Las Heras, que dio a luz en el hospital Carrillo de Las Heras.
“El embarazo adolescente es un flagelo en la zona. Siempre estas situaciones representan serios riesgos para la madre y el bebé. Nosotros recibimos muchos casos -la mayoría no trascienden porque buscamos proteger su identidad- que llegan sin haber tenido un control en seis o siete meses de la concepción. Esto es muy grave”, comentó preocupado Brian Kolliker, gerente asistencial del hospital Antonio Scaravelli.
En el Centro de Salud 181, de Villa Seca, trataron a la pequeña –en un principio- por dolores de cabeza. “Yo  le pregunté a la mamá si ya menstruaba. La experiencia nos dice que no debemos descartar embarazo, aunque sean muy pequeñas. Como me dijo que sí, le di turno para el lunes, que es cuando viene el toco-ginecólogo al Centro”, explica la referente sanitaria que trató el caso.
En el Centro confirmaron su estado de gravidez, tras hacerle dos test en el momento. Esto fue a mediados de junio y la pequeña ya cursaba el sexto mes de embarazo. Enseguida, Salud radicó la denuncia y el padrastro de la niña –un hombre de 55 años- quedó detenido y fue puesto a disposición de la Justicia.
Por otro lado, desde el hospital Scaravelli informaron que este lunes dio a luz una pequeña de doce años. Tanto la mamá como el bebé se encuentran aún en observación, pero presentan buen estado de salud. “La niña ingresó por guardia, la primera vez, por un dolor abdominal. Tras evaluarla, se le diagnosticó una gestación avanzada”, informó Kolliker.
La pequeña vivía en Anchoris, Tupungato, y hace poco tiempo se trasladó a otra casa sobre la ruta 40. El caso fue derivado desde el nosocomio hacia los profesionales del GAR (Grupo de Alto Riesgo) para que fuera abordado integralmente.