- Ha abierto una ruta que reducirá el tiempo de tránsito de los barcos
- Multiplicará los ingresos de una vía por la que transita el 8% del comercio mundial
- Según Al Sisi esta obra demuestra que ‘los egipcios prefieren la vida la terrrorismo’
El Canal de Suez queda abierto para el tránsito de buques
De regreso a tierra firme, en las áridas inmediaciones de la ciudad deIsmailiya, Al Sisi ha abierto una ruta que reducirá el tiempo de tránsito de los barcos y -según las cuestionadas cifras de las autoridades-multiplicará los ingresos de una vía por la que transita el 8% del comercio mundial. El ex jefe del ejército, que colgó el uniforme en 2014 tras urdir el golpe de Estado que desalojó del poder a los islamistas, ha estado arropado por líderes llegados de medio mundo, entre ellos el presidente francés François Hollande, y las máximas autoridades religiosas del país. La ministra española de Fomento Ana Pastor también ha participado en el acto.
«El nuevo Canal de Suez es un mensaje al mundo de que los egipcios prefieren la vida al terrorismo«, ha declarado Al Sisi en un discurso en el que ha subrayado que los trabajos se han llevado a cabo «bajo azarosas circunstancias políticas y de seguridad», en referencia a la insurgencia yihadista que golpea a las fuerzas de seguridad desde la asonada, especialmente activa en la península del Sinaí con la que linda el canal.
«En el último año, Egipto no sólo ha proporcionado este regalo al mundo. La Historia recordará que Egipto se ha enfrentado a la ideología terrorista más peligrosa, que quemaría el planeta si pudiera», ha señalado, entre aplausos, tras proceder a la firma del inicio de operaciones del canal. «Tenemos la voluntad y la determinación de derrotar y erradicar el terrorismo», ha recalcado.
En la alocución, interrumpida por las bocinas de los primeros navíos que han cruzado el nuevo canal, el mariscal de campo ha presumido de que «los egipcios lo pueden hacer a tiempo», al cumplir el plazo de ejecución. «Es sólo el primero de miles de pasos hacia delante. Los egipcios necesitan demostrarse a ellos mismos y al mundo que son capaces«, ha reconocido en una intervención que ha cerrado un actuación musical y un breve espectáculo de pirotecnia.
Convertido en el proyecto estrella de su Presidencia, la apertura del segundo canal -«el regalo de Egipto al mundo»o el «gran sueño egipcio», como lo han bautizado la prensa local- ha estado precedida de una intensa campaña mediática. Según las autoridades, la obra -con un coste de 8.500 millones de dólares, financiado a través de bonos del Estado con un atractivo 12% de interés anual durante cinco años- permitirá reducir el tiempo de tránsito de los barcos -pasará de las 18 horas actuales a las 11 horas- y multiplicará la capacidad de la vía marítima -de los 49 buques diarios a los 97 previstos para 2023-.
El aumento del tráfico logrará doblar los ingresos: de los 5.300 millones de dólares (4.600 millones de euros) cosechados en 2014 a los 13.200 millones (11.680 millones de euros) calculados para 2023. Los trabajos realizados durante el último año han afectado, además, a otros 37 kilómetros en los que se ha ampliado la profundidad del canal hasta los 24 metros. La construcción, firmada por seis empresas extranjeras, fue lanzada hace 12 meses en una ceremonia en la que Al Sisi rebajó a un año el plazo de ejecución de cinco años estimado por las consultoras internacionales.
Los analistas, sin embargo, recelan de los números presentados a bombo y platillo por El Cairo, en extrema necesidad de relanzar la economía local tras más de cuatro años de agitación política que han espantado a la inversión extranjera. La consultora Capital Economics advirtió el lunes que las expectativas generadas por el régimen pecan de excesivo optimismo. «Según nuestros cálculos, para lograr sus objetivos, el volumen del comercio mundial tendría que aumentar alrededor del 9% anual. Es mucho más alto del 3% de media que ha crecido en los últimos cuatro años», indicó la firma con sede en Londres.
Sé el primero en comentar en «Al Sisi inaugura el nuevo Canal de Suez, ‘el regalo de Egipto al mundo’»