Carlos Tévez, el aguerrido atacante de Fuerte Apache, un barrio pobre del Gran Buenos Aires, quería volver desde hace años al terruño. Y este miércoles, a sus 31 años, lo ha logrado. Juventus yBoca Juniors anunciaron que el goleador del subcampeón de la Champions League, que ha regresado a la selección argentina y está jugando la Copa América de Chile, vuelve al club más popular de Argentina, aquel en que debutó en el fútbol profesional.

Siempre Carlitos había echado de menos su país y su barrio, por más que allá donde iba se consagraba campeón. Lo fue con Corinthians, los Manchester United y City y Juventus. Allí donde jugaba se ganaba el favor del público, incluso aquel que en principio recelaría de un jugador argentino por las rivalidades históricas, como el de Brasil o Inglaterra. También es cierto que de varios de esos equipos acabó yéndose en medio de tensiones con dirigentes o entrenadores.

Tévez solía cansarse de sus clubes, pero de la Juve se va en el mejor momento, cuando había conquistado el scudetto y había acariciado la Champions. Donde aún tiene mucho por demostrar es en la Copa América ya que no se ha lucido en los tres segundos tiempos en que Gerardo Tata Martino lo ha sacado al campo.

Los dirigentes de Boca dicen que no han hipotecado el club para conseguir los goles y arremetidas de Tévez. Han pactado resarcir a Juventus por el ultimo año de contrato de El Apache en ese equipo a cambio de tres jugadores jóvenes, incluido Guido Vadalá, y 5 millones de euros. Tévez jugará por tres años en Boca. Carlitos regresa en plenitud, a diferencia de Pablo Aimar y Javier Saviola, que este año han vuelto a River Plate en el final de sus carreras.