El paradero de Rolando Garrido, un cobrador que residía en Las Heras, sigue siendo un verdadero misterio. Ya pasaron dos meses de su desaparición y parece que se lo hubiese tragado la tierra. Pese a los escasos resultados, la investigación está abierta y en los últimos días han surgido nuevas pistas.
Fuentes allegadas a la investigación indicaron que sigue firme la pista investigativa de que «el cobrador se fue por sus propios medios».
Es que para las pesquisas, hasta ahora, «no surge de la investigación que haya sido secuestrado o víctima de algún otro delito».
Una de las últimas medidas que se tomaron fue solicitar un ADN a los familiares y cotejarlo con restos humanos que fueron hallados en un descampado de El Algarrobal en Las Heras.
Para hacer el cotejo genético con la familia de Garrido, se aguardan las pericias solicitadas por la Fiscalía Especial de Daniel Carniello que investiga un homicidio en esa jurisdicción.
Garrido fue visto por última vez el pasado 30 de marzo, cuando se despidió de su familia en La Primavera y partió en su moto a hacer cobranzas, como lo hacía habitualmente. Desde ese día, nada se sabe de él.
Ni la intervención en su celular, ni los informes sobre el geoposicionamiento del aparato permitieron establecer su último lugar de ubicación.