«Después de la pelea me sentí ganador, pero sabíamos que era muy difícil ganar en Japón por la mínima diferencia», tiró apenas cruzó la puerta del aeropuerto de Mendoza.
El enojo por la forma en que perdió el título era notable. Tanto él como sus colaboradores coincidieron en que no fue justo.
«Si Dios quiere en cuatro meses tendré la revancha con Ioka. La AMB le mandó un comunicado el jueves a la mañana al Negro Rivero diciendo que le iban a exigir a Ioka que su primer defensa del título sí o sí se haga conmigo». Y agregó que «la vida siempre da revancha, en 120 días posiblemente estemos nuevamente en Japón».
Pero la mirada de Reveco está firme en una posible revancha. «El Negro Rivero me contó el jueves en el desayuno que le comunicaron desde la AMB que me habían visto ganador a mí. Por eso iban a exigir una revancha urgente. De aquí a que se dé es otra cosa, pero ojalá se haga porque tengo muchas ganas. En la previa de la pelea ya estaba hablado que si perdía podría haber un nuevo combate».
Sobre las características boxísticas del japonés Ioka contó: «Es muy rápido de piernas y tiene una derecha muy buena. No tiene la mano pesada pero labura muy bien el cuerpo. Era lo que espereba de él porque lo había analizado mucho».
«Como autocrítica pienso que lo tendría que haber buscado más. No es excusa pero estuve dos semanas sin guantear y eso se notó. En ningún momento lo pude encontrar. Físicamente me sentí perfecto, llegué al último round como si fuese el primero», cerró Cotón, que fue abrazado por muchos familiares, amigos e hinchas.
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