Con la llegada del invierno los mendocinos comienzan a sacar de su placard la ropa de verano y renovar o comprar parte de la indumentaria o calzado que le hace falta.

Pero los altos costos que enfrentan los negocios minoristas, como son los aumentos en alquileres, sueldos e impuestos, impactan directamente en el precio final de los productos que ofrecen. Por lo que los mendocinos que salgan en busca de alguna prenda en particular para esta nueva temporada otoñal, tienen que tener en cuenta que se encontrarán con incrementos de precios de entre el 30% y el 40%, respecto del año pasado.

En marzo, en Mendoza y según datos de la Federación Económica Mendocina (FEM) las ventas minoristas subieron 1,2% en comparación con un 2014 repleto de números negativos. No obstante, esto no impidió la suba de precios de la indumentaria de una temporada a otra -calculada por comerciantes y vendedores- y que, para el tercer mes del año y según datos del Indec, tuvo un incremento de 1,5%.

Este diario realizó un recorrido por locales del centro mendocino de indumentaria femenina, masculina y para niños, así como calzados con el objetivo de conocer cómo vienen los precios este año. De este modo, se observaron los altos valores de algunas prendas en este 2015.

Según los propietarios y empleados de los locales, los aumentos reflejan el componente inflación. Sin embargo, esto se contrapone con el porcentaje esperado este año, el cual será menor al 2014.

Más caro

El porcentaje varía según la calidad de la indumentaria que ofrece la marca. En general, el promedio de aumentos ronda el 30%.
Desde uno de los locales de ropa femenina, Nativo, la encargada destacó que en comparación con el año pasado el incremento es del 40%.

Según contó “la gente siente las subas y lo manifiesta, por lo que desde el local siempre estamos en la búsqueda de innovar. Desde hace tiempo incorporamos ropa de fiesta la cual, más allá de los incrementos, se sigue vendiendo”.

Por otro lado, la empleada de Silenzio, local que vende ropa femenina, coincidió con el incremento con respecto a la temporada de invierno de 2014. Sin embargo, señaló que hay algunas iniciativas del Estado, como es el Ahora 12 -doce cuotas sin interés de jueves a domingo con tarjetas de crédito- ayudan a que las ventas no se vean tan rezagadas.

Con respecto a los aumentos de precios de esta temporada, Trípodi indicó que en el relevamiento realizado por la FEM, los aumentos no son tales y no deberían ser, teniendo en cuenta que la inflación será menor.

Desde Legacy, empresa que vende particularmente ropa masculina, el encargado fue más crítico en destacar que las ventas caen cerca del 50%, a pesar de que en su caso los aumentos han sido más tímidos, cercanos al 20% y 30%.

Con respecto a la caída de las ventas, desde Silenzio también concordaron un promedio de 40% y 50%. No obstante, fueron optimistas en señalar que “esperan que en el avance de temporada y cuando lleguen los fríos más crudos el panorama sea mejor”.

No obstante, a pesar de que desde los negocios mencionan la baja en las ventas, la Federación Económica de Mendoza informó que las ventas minoristas de marzo medidas en cantidades en comparación con igual mes del año pasado, los calzados tuvieron un incremento del 2,13%, mientras que textil indumentaria fue del 1,5%.

“El mes pasado se observó un consumo más activo y expectativas económicas más estables, ya que el año pasado se produjo una fuerte devaluación”, remarcaron desde la FEM. Según Adolfo Trípodi, presidente de esta entidad, la buena performance está impulsada principalmente por el flujo de turismo.

“Esto ayudó a sopesar la caída que se venía dando mes a mes, sumado a las promociones, descuentos y las facilidades de 12 cuotas sin interés acompañaron las ventas”.

Para el caso de los niños, la situación de aumentos es similar al resto no así la caída en las ventas. Desde dos marcas, que prefirieron no ser mencionadas, aclararon que los padres priorizan la indumentaria y calzados de sus hijos frente a las de ellos. Además, “los más chicos crecen tan rápido que cada temporada deben renovar el placard, por lo que pasa a ser una necesidad”.

Con respecto a las expectativas de que las ventas minoristas continúen la tendencia alcista, es que Adolfo Trípodi se animó a decir que el 2015 será mejor que el 2014. “Frente a las elecciones es muy factible que haya más dinero en la calle. El Gobierno inyectará dinero a través de diversas medidas, todas ellas para impulsar el consumo. Además, existe un buen clima de compra por la tranquilidad cambiaria.

El poder adquisitivo está bastante atrasado por el impacto de la inflación, pero si se cierran paritarias rápidamente y se mejora el poder adquisitivo la tendencia puede mejorar”.

Costos 

El impacto que tienen los aumentos de los productos están relacionados a que los sueldos, alquileres, impuestos, entre otros, han tenido incrementos que lógicamente han tenido que trasladar al bien final y, de este modo, lo termina absorbiendo el consumidor.

Así, según los empresarios mendocinos el incremento en algunos alquileres es casi del 30% y para algunos de ellos, el ajuste inflacionario es cada 3 o 6 meses. Lo mismo que los sueldos, que a pesar de que aún no han entrado en paritaria, el aumento que estarían solicitando sería cercano al 30%, 15% en abril y 15 % en noviembre y tres cuotas no remunerativas de $ 1.200 cada una.

Algunos precios

En los locales de indumentaria y calzado del centro mendocino las vidrieras muestran todo lo que se viene para esta temporada, que al parecer va a ser más complicada que el año pasado. Se pueden visualizar pantalones de mujer entre $ 400 y $ 1200, cuando el año pasado estaban entre $ 250 y $ 890.

En el caso de las camperas, el valor aumenta, dependiendo la calidad y la tela. Pero se pueden encontrar tapados entre $ 1500 y $ 3000, camperas de lana por $ 600, de hilo por $ 800, un sweeter por $ 398 y una camisa de dama por $ 388. En el caso de las remeras de mangas largas, hay algunas que están costando entre $ 200 y $ 300.

Para los hombres, los valores son aún más caros. Se pueden encontrar camisas a $ 500 o $ 900 y un pantalón de jean por $ 980. En el caso del calzado, los aumentos se han visto con incrementos mayores al 30%. Una bota corta cuesta entre $ 1.200-$ 1.600, una de caña alta entre $ 1.500 y $ 2.500.

En las casas para niños niños, algunos precios no están tan distantes de las de adultos. Camperas por $ 890, pantalones entre $ 400 y $ 600, camperas de lana por $ 500 y zapatillas que arrancan en los $ 280 y llegan a costar $ 500.

Fuente: http://www.losandes.com.ar/article/la-temporada-de-invierno-llega-con-subas-de-hasta-40

Laura Saieg – lsaieg@losandes.com.ar