Al respecto, el presidente del INV, CPN Guillermo García, afirmó que “le hemos propuesto a la Comisión Asesora Técnica un nuevo método de evaluación de estos vinos, que responden a parámetros físico-químicos, y también a parámetros sensoriales. Es decir, poder hacer una calificación de los vinos, previo al traslado, es decir, previo al movimiento, a una bodega que lo va a fraccionar. Nosotros pretendemos que cumpla un doble objetivo, que por un lado ayude a la formación de esta oferta, para los fines de los programas de los gobiernos nacional y provincial, y al mismo tiempo para dar una señal respecto de la cosecha 2015, a los efectos de que se haga un vino blanco que tenga un mercado. Por lo tanto, lo que estamos haciendo es atender a una urgencia, pero con una mirada estructural, que está basada, como siempre insistimos, en la calidad de nuestro vino blanco”.
En cuanto a las medidas de los gobiernos provincial y nacional, el presidente del INV dijo que “ya se están tomando, con lo cual los resultados se van a ver en las próximas horas. De hecho, en muchos casos, hay algunas operatorias que ha lanzado el Gobierno de la provincia de Mendoza, que efectivamente se han realizado y que nuestra colaboración ha sido garantizar la calidad del vino que la provincia de Mendoza adquirió, que pagó y por otro lado, también está este nuevo desafío de ver cómo generamos una oferta exportable para poder contribuir a equilibrar los stocks”.
Por este motivo, a través de la Subgerencia Operativa, el INV realizó un relevamiento de existencia y calidad de vinos blancos escurridos. La tarea se desarrolló desde el 13 al 23 de enero de 2015, inspeccionándose 163 bodegas de las jurisdicciones de las Delegaciones Mendoza, San Martín, San Juan, San Rafael y Subdelegación General Alvear.
En el operativo, se requirió por los vinos blancos escurridos, contabilizándose en total 177.373.199 litros, casi un 70% de la existencia total de este tipo de vinos. Además, los inspectores realizaron una degustación primaria y posteriormente tomaron muestras de volúmenes representativos, alcanzándose las 260 muestras, por un total de 52.808.631 litros.
Simultáneamente, con el mismo criterio, utilizándose los mini laboratorios, se analizaron 210 partidas por la cantidad de 36.187.655 litros.
También, en el marco del operativo de Inspección, se retiró de circulación 44.500 litros de la existencia total de vinos blancos escurridos, un 0,01 % que quedaron no disponibles, por no cumplimentar con los requerimientos analíticos.
En otra etapa de la fiscalización de estos productos, el análisis que se practica en los laboratorios fijos del INV, se desprende que del ponderado de los análisis, resulta un producto de alrededor de 13 grados de alcohol y una acidez volátil de 0,55 g/l, destacando que el límite permitido de este tenor es de 0,80 g/l para la libre circulación de vinos y de 1,20 gramos por litro, para tenencia en bodegas.
La evaluación sensorial fue realizada por expertos del área específica. En esta caso, de las muestras al azar que fueron evaluadas, se obtuvo una media de 63,4 puntos acorde para vinos de esta categoría. Se destaca, que en una escala de 1 a 100 para la puntuación de vinos, el máximo pretendido para un vino “blanco escurrido”, es de 80 puntos.
Como conclusiones de la evaluación organoléptica realizada por los catadores se considera que estos vinos, a pesar de cumplimentar con valores analíticos normales, a nivel sensorial se agrupan en dos categorías de acuerdo al veredicto de su calidad global:
A) Con puntaje de 60 a 83, representados en la muestra para evaluación por 3.077.000 litros presentaron características sensoriales normales acordes a los perfiles buscados en vinos blancos escurridos pudiendo los mismos ser candidatos para su comercialización, en algunos casos con ajustes tecnológicos previos. Se trata de vinos que en su evaluación holística no acusan defectos sobresalientes.
B) En el rango inferior se observan vinos con puntajes de 47 a 59 representados por un volumen de 1.824.000 litros, los mismos presentaron características sensoriales que reflejan la presencia de algunos defectos y desarmonías. Estos vinos para su adecuación requieren correcciones eno-tecnológicas, previo a su disposición para la comercialización (cortes, filtraciones, clarificación, estabilización tartárica, acidificación, etc.).
Transpuesto el estudio a la masa general, evaluados los parámetros analíticos y sensoriales, los 258.000.000 millones de litros de vino blanco escurrido en existencia al 01 de enero de 2015 están conformados por un 62,78 % de vinos de calidad normal y por un 37,22 % de vinos que luego de ser técnicamente mejorados, alcanzarían un nivel de calidad suficiente.
Fuente:http://www.elsol.com.ar/nota/227969/empresas/el-inv-propone-un-nuevo-metodo-para-mejorar-la-calidad-de-los-vinos-blancos-escurridos.html
Por: ElSol.com.ar
@elsolonline
Sé el primero en comentar en «El INV propone un nuevo método para mejorar la calidad de los vinos blancos escurridos»