Desde el bloque de la UCR se presentó un proyecto de ordenanza, para, dentro del marco de la “diversión nocturna”, regular lo que ocurre fuera de las fiestas privadas, donde menores que no están invitados intentan entrar y provocan desmanes.

 Los cumpleaños de 15 suelen ser los eventos privados que más jóvenes convocan sin invitación a las puertas de los salones donde se llevan a cabo. Hoy la legislación obliga al propietario del lugar, a contar con personal de seguridad en base a la cantidad de personas que participan de la fiesta. Sin embargo, los que no pueden ingresar, se quedan en la calle y frecuentemente provocan desmanes o hechos de vandalismo.  

 Este miércoles se reunió el Consejo Departamental de Seguridad, para ver cuáles son los puntos presentados en el proyecto que sufrirá algunas modificaciones, a raíz de la opinión de los distintos agentes que componen el organismo.

 A partir de la pieza legal que se construirá, quedará mucho más claro la responsabilidad que le cabe a la policía, a los particulares que llevan adelante la fiesta, a los propietarios de los salones e incluso a los padres de los menores en cuestión.