Brasil entró en recesión y crea preocupación en Mendoza

La desaceleración económica brasileña impactará negativamente en las economías regionales más dependientes de ese país. Nuestra provincia exporta unos U$S 350 millones en promedio por año. Afectará a las frutas frescas, olivicultura y vitivinicultura.

Uno de los principales socios comerciales de Mendoza está enfermo. Se trata de Brasil, que según estadísticas publicadas por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE) entró en recesión técnica tras dos trimestres consecutivos de caída de su actividad económica.

Exportadores de diferentes sectores de la provincia analizaron la situación y mostraron preocupación por el impacto económico que sufrirán los envíos a ese destino.

Si bien la retracción del país vecino fue leve (0,2% en el primer trimestre y 0,6% en el segundo), se encendió la luz de alarma y hay temor por los cambios que puedan aparecer en las reglas de juego. No es para menos, teniendo en cuenta que en un año promedio Mendoza exporta unos 350 millones de dólares FOB a Brasil, según estadísticas publicadas por la Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas (DEIE).

Tal vez una de las miradas más optimistas es la de Daniel González, gerente de ProMendoza. “La recesión de Brasil provocará un impacto negativo en nuestros envíos en términos de valor, por que los importadores van a intentar pagar menos, pero en volumen la afección será muy leve, considerando que la mayoría de nuestros productos son alimenticios de primera necesidad”, señaló.

Por su parte, Mario Bustos Carra, gerente general de la Cámara de Comercio Exterior de Cuyo, se mostró preocupado por la contracción del consumo, que desde su punta de vista repercutirá en una disminución de la demanda de los productos mendocinos y también provocará caída en los precios de importación.

“En ese momento podemos vernos realmente afectados, por que si los valores de mercado bajan podemos quedarnos afuera por falta de competitividad. No hay que olvidar que tenemos problemas de inflación serios y atraso en el tipo de cambio”, opinó el experto.

De todas formas, Carra fue dentro de todo optimista y recomendó esperar a ver cómo actúa Brasil antes de sacar conclusiones. “Brasil no es Argentina. Su gobierno seguramente tomará medidas determinantes de forma inmediata que le permitirán revertir la situación a tiempo”, señaló.

Dependencia de Brasil
La cercanía y el tamaño del mercado brasileño lo convierten en un socio ideal para la mayoría de los exportadores mendocinos. El problema, es que a veces se convierte en casi el único destino para algunos productos.

Raúl Aruani, gerente de la Asociación de Productores y Exportadores de Frutas Frescas de Mendoza (Aspeff), reconoció que “la mayoría de las frutas frescas de exportación mendocinas son dependientes de Brasil”.

“La recesión del país vecino tendrá impacto comercial negativo en todos los sectores que exportan a ese país. En nuestro caso, ya venimos muy golpeados por los costos crecientes y la falta de competitividad. Esperamos que para 2015 Brasil haya podido reactivar su economía. De lo contrario, nuestros problemas se profundizarán aun más”, opinó el experto.

También el sector olivícola tiene un alto grado de dependencia de Brasil, tanto para aceites como para aceitunas en conserva. Luis Armando Mansur, presidente de la Asociación Olivícola de Mendoza (Asolmen), reconoció que el sector es “muy sensible” a cualquier cambio en la economía brasileña, por que “no son productos de primera necesidad”.

Si bien Mansur consideró que es pronto para conocer la magnitud del impacto, destacó que la industria olivícola se encuentra en un momento de plena crisis, tanto en mercado interno como externo.

“Para que no cierren más empresas, necesitamos ayuda del Gobierno urgente”, reclamó.

Diferente es la realidad del sector vitivinícola. Juan Carlos Pina, gerente de Bodegas de Argentina, observó que “Brasil es el tercer o cuarto mercado para los vinos de exportación argentinos”, por lo que la recesión de Brasil tendrá un claro impacto negativo, pero no será determinante.

“Sí se verán más afectadas las bodegas con mayor participación en ese país”, concluyó.

Ventas externas en crisis

Desde la mirada de los economistas, la recesión de Brasil es un dato que será sin duda determinante para muchas economías regionales.

Leonardo González, economista de la Fundación Ideal, destacó a toda la industria frutícola, el ajo y el sector olivícola como algunas de las economías regionales que se verán más afectadas.

“Está claro que habrá menor demanda de nuestros productos. Lo más preocupante es que sucede en un contexto que ya era difícil para los exportadores de nuestra provincia, considerando que en el primer semestre la mayoría de los productores fueron a pérdida en sus exportaciones”, indicó.

El técnico no minimizó el grado del impacto que pueda tener la recesión brasileña. “Es nuestro segundo mercado de exportación; el 20% de los envíos van a ese destino”, advirtió.