El Ministerio de Salud de la Nación lanzó un nuevo método anticonceptivo con el objetivo de paliar la problemática del embarazo adolescente y que está destinado a jóvenes de entre 15 y 19 años. Según el titular del Programa Provincial de Salud Reproductiva, el implante que se coloca debajo de la piel de la mujer aún no llega a Mendoza y todavía no se sabe cuándo estará disponible en la provincia. Especialistas en el tema reconocieron que es una muy buena propuesta pero temen que sea “un arma de doble filo” ya que no protege contra las enfermedades de transmisión sexual.

Este método anticonceptivo es una varilla del tamaño de un fósforo que se coloca debajo de la piel de la joven y que va liberando hormonas lentamente por 3 años evitando así la ovulación. El implante ofrece un 99 por ciento de efectividad y el objetivo es combatir la problemática del embarazo adolescente por lo que, en principio está destinado a chicas de entre 15 años y 19 años que ya hayan sido mamás y que no tengan obra social o prepaga.

Actualmente, en la provincia, el 15 por ciento de los embarazos son de madres adolescentes. Esto implica que, de cada 100 recién nacidos vivos, 15 corresponden a una mamá de entre 10 y 19 años. Por este motivo, la iniciativa apunta a disminuir esta tasa que aún está por debajo del promedio nacional.

“Aún no tenemos la fecha exacta de cuándo estará disponible este método en Mendoza ya que lo recibirá en una etapa posterior. Esto es así porque se han priorizado las regiones que presentan mayores casos de embarazos adolescentes en el país”, explicó Pablo Alonso, titular del Programa Provincial de Salud Reproductiva.

Si bien este método es seguro y muy efectivo en la prevención de embarazos, no protege contra las enfermedades de transmisión sexual como el VIH/Sida, Sífilis y el Virus del Papiloma Humano (VPH), entre otras. Por este motivo, especialistas en el tema reconocieron que es la propuesta es muy buena pero que es necesario hacer hincapié en la educación sexual y en la concientización de los más jóvenes.

“Ningún anticonceptivo protege de las enfermedades de transmisión sexual excepto el preservativo por lo que es necesario trabajar en la educación para que los chicos asuman responsabilidad, conozcan la importancia del condón y no dejen de utilizarlo durante sus prácticas. No debemos dejar esto de lado”, expresó Gioconda Locastro, ginecóloga.

Lo interesante de este método es que desliga a la joven del esfuerzo de tener que tomar la pastilla anticonceptiva cada noche y respetar los horarios de las dosis ya que el implante actúa solo durante tres años. Lo cierto es que, en este punto, surge el debate acerca de la desventaja que podría presentar este aspecto.

“Se ha desdramatizado tanto a la sexualidad que los adolescentes han desvalorizado su vida sexual y esto ha dado paso a un aumento en la promiscuidad. Este es un buen método anticonceptivo y combate una problemática real, pero también hay que prestar atención a otra situación y es que si al dársele esta facilidad a las jóvenes pueden sentir que están totalmente protegidas pero deben saber que sólo evitan quedarse embarazadas no todas las enfermedades que pueden contagiarse por lo que también puede ser un arma de doble filo”, manifestó Yolanda Cicella, anatomopatóloga especializada en cáncer de cuello de útero.

Al respecto, Alonso dijo que se trata de distintas aristas de una misma problemática y que desde el Ministerio de Salud hay que garantizar los métodos de anticoncepción e información al respecto y, a su vez, la accesibilidad a estos.

“Si la adolescente elige este método la ayudamos a regular su fertilidad y planificación familiar y tendremos que ver cómo abordamos otras problemáticas a las que podría quedar expuesta. Las infecciones de transmisión sexual son una probabilidad por lo que hay que trabajar en concientizar sobre la importancia de los controles anuales pero no por eso le vamos a negar esta forma de anticoncepción”, señaló Alonso.

Las destinatarias

Este método anticonceptivo hormonal está dirigido a adolescentes de entre 15 y 19 años y si bien la información es reciente, las jóvenes evaluaron con buenos ojos la iniciativa aunque también reconocieron los riesgos que puede suponer para varias chicas.

“Me parece una buena propuesta. No sé si dolerá o no la colocación del implante pero creo que ayudaría. Tengo primas que han sido mamá a los 13, 14 y 15 años, quizás esto pueda revertir un poco lo que está sucediendo”, expresó Agostina Vera de 15 años de Luján de Cuyo y estudiante del Departamento de Aplicación Docente (DAD).

Marina Quiroga de 20 años contó que fue madre a los 16 años y reconoció que se trató de un “descuido”. Se manifestó a favor del método aunque planteó que quizá “de rienda suelta a muchos jóvenes. Yo me quedé embarazada de mi novio, fue inmaduro y ahora que pasaron los años puedo verlo e incluso ahora que ya tengo mi casa y mi pareja y yo tenemos un trabajo estable estamos considerando en tener otro hijo. Me colocaría el método pero también creo que esto puede ocasionar que muchas adolescentes tengan relaciones sin cuidarse con preservativos con los riesgos que eso representa”, dijo la joven lasherina.

Fuente: El Sol – http://elsolonline.com/noticias/ver/1407/208599/especialistas-aseguran-que-el-nuevo-anticonceptivo-puede-ser-un-arma-de-doble-filo