Mendoza. Se trata de un ultimátum, con el que el Gobierno buscará finalmente convencer a los docentes y cerrar un frente de conflicto. Tras una jornada tensa, el Sute llevará a las escuelas una oferta salarial del 30,5 por ciento de aumento, que se pagará a partir de marzo y en una sola cuota. En tanto, el Gobierno mantuvo en suspenso la posibilidad de realizar más descuentos por estos cinco días de paro a condición de aceptar la propuesta.
Hay una diferencia significativa entre las anteriores ofertas y ésta, que en algún momento hizo zozobrar la negociación. Por ejemplo, los trabajadores de la educación recién percibirían el aumento total en octubre, si uno recuerda que en principio la oferta implicaba aumentos escalonados en tres cuotas. El Gobierno la considera la propuesta definitiva y es lo que buscará imponer en otras paritarias. Pero para eso también hubo una señal que llegó desde la Nación: en la tarde del lunes, el Ministerio de Educación y los gremios nacionales acordaron un piso salarial de 29,5 por ciento para 2014. Un marco de referencia que en Mendoza, aunque lo nieguen, también estaban esperando para no repetir experiencias pasadas.
El aumento es remunerativo y bonificable, apunta al estado docente y a a la asignación de clase y, a diferencia de la semana pasada, el Gobierno deja de lado las cuotas para abonar este 30,5 por ciento en un solo pago a partir del mes de marzo. Este es un punto en el que no hay acuerdo con el gremio, puesto que el mandato del último plenario consistía en reclamar un incremento a pagarse desde enero.
«Es la última propuesta, el máximo esfuerzo presupuestario posible, que no será menor al 30,5 por ciento para cualquier trabajador de la educación», explicó Andrés Cazabán, el coordinador de paritiarios de la Administración Central. En esta línea, el interlocutor indicó que el piso salarial para el docente que recién se inicia será de 4.700 pesos -actualmente es de 3.500-. «Esto constituye la mejor propuesta de incremento salarial porcentual que se haya formulado en el país», añadió, sin dejar de mencionar que se sitúa por arriba del acuerdo nacional.
Cazabán indicó que el incremento en estos términos implica una suma de 1500 millones de pesos para el Estado provincial.
La presión con los descuentos por los días de paro
A eso le acompaña de otras circunstancias no salariales, pero más políticas.
Una de ellas es que mantiene en suspenso la decisión de no descontar los días parados en el año -dos paros, uno por 48 y otro por 72 horas, cinco días hábiles sin clases-. Los bonos de marzo llegaron, precisamente, con significativos descuentos correspondientes a 2013, lo que encendió la mecha en el ánimo de los trabajadores de la educación que venían de realizar -en total- cinco días de paro desde que comenzó el ciclo lectivo. Por eso, desde ayer a la mañana, cercaron la Subsecretaría de Trabajo con piquetes sobre San Martín y Rondeau, que se mantuvieron hasta el fin del encuentro.
Aquí el Gobierno mantiene la herramienta legal del descuento por el día no trabajado como un fusible de negociación.
«El no descuento de los días de paro de este año está condicionado a dos aspectos. Primero, a la aceptación de esta propuesta y, en segundo lugar, a un plan de recuperación», explicó Cazabán.
Aunque el funcionario no quiso admitirlo, en el fondo se trata en el fondo de un elemento de presión a partir de lo sucedido en el cierre contable de marzo.
Adelantar la paritaria 2015 a octubre
La otra propuesta de seducción es adelantar la paritaria del 2015 a octubre de este año, que se complementará con una comisión técnica mixta que realizará un control de índices de precios al consumidor y su impacto en el salario de los trabajadores.
Más allá de la voluntad política por comenzar antes de tiempo la discusión -recordemos que el SUTE y otros gremios pedían reanudar la negociación en diciembre pasado debido al ritmo inflacionario-, es evidente que desde el oficialismo también buscarán resolver los conflictos gremiales antes de que explote la campaña electoral nacional y provincial el año próximo.
Guiños desde la cúpula del Sute
Pese a la insistencia periodística, Adrián Mateluna -secretario general del Sute- evitó pronunciarse antes de que lo hagan los maestros y celadores en las escuelas. El gremio pidió un cuarto intermedio para llevar esta propuesta a las bases. Desde el Sute indicaron que recién será la semana próxima, sobre todo, porque en ésta hay un feriado de por medio -el miércoles, 2 de abril, por los caídos en la guerra de Malvinas-. En este sentido, no adelantaron una fecha del plenario, pero consintieron en que el conflicto ya no puede extenderse más, por el desgaste, los descuentos y el malhumor en la sociedad.
«A esta altura, el Gobierno tenía que empezar a dar respuesta. Hoy ha traído una propuesta que es superadora, pero que son los compañeros los que tienen que decidir», agregó Mateluna. Escuetamente, el gremialista consideró que la oferta se acerca a las pretensiones de los trabajadores de la educación.
El mismo formato para Salud
Por su parte, Cazabán también adelantó que está propuesta será definitiva también para los otros gremios estatales con los que la negociación continúa y no en los mejores términos, como sucede con ATE Salud y Ampros.
Aunque el paritario oficial del Gobierno no indicó que sería en las mismas condiciones, el Gobierno ha mantenido la misma oferta paralela en distintas negociaciones -aún cuando aclaren que cada sector tiene sus particularidades-.
Precisamente, este martes se reunirán con los gremios combativos, aunque ya logró cerrar con un sindicato más afable y cercano al oficialismo, ATSA. En la puja salarial, el ala combativa de la salud pública ha reclamado un 45 por ciento de aumento salarial, un punto que el Gobierno ha rechazado de manera terminante.
Fuente: El Sol
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