El acuerdo para mantener los valores de 500 productos debería regir hasta fin de año, pero dos cadenas ya lo dieron de baja y otras lo cumplen poco. Carnes, yerba, fideos y arroz lideran las subas.

Tras las elecciones, el pacto oficial para “congelar” 500 precios del súper se había extendido “al menos hasta fin de año”, y el Gobierno acaba de confirmarlo. Pero la realidad de las góndolas muestra otra cosa: en medio de subas que se aceleraron, el acuerdo se respeta cada vez menos y ya hay cadenas que lo dieron de baja por completo.

Tal como ocurrió con el primer “congelamiento”, que terminó antes de lo previsto, Disco y Jumbo volvieron a adelantarse en sacar sus precios del “freezer”. Mientras Guillermo Moreno se despedía de la Secretaría de Comercio, esas cadenas retiraron toda la cartelería de la “Canasta Nacional” y aumentaron un prolijo 9% todo lo que aún vendían a los valores pactados.

Así, el sachet acordado de leche La Serenísima subió en Disco y Jumbo de $ 6,89 a $ 7,51, el kilo de arroz Lucchetti se “descongeló” de $ 13,99 a $ 15,25 y la polenta Arcor, antes a $ 5,99, se fue a $ 6,53. También aplicaron el 9% en convenidos como quesos, yogures, harina, azúcar, café, galletitas y dulce de leche. “Lo de los congelados terminó ni bien renunció Moreno”, respondieron empleados de Jumbo.

Mientras, Coto, Walmart, Carrefour y Vea todavía respetan parte de los 500 valores. Pero el incumplimiento es creciente y generalizado en carnes, verduras y otros, como yerba, aceite y harinas.

El asado, por caso, debería venderse a unos $ 40 el kilo, pero en noviembre pasó a $ 47 en Coto y Carrefour, a $ 54 en Walmart y Vea, y a $ 56 en Disco: en promedio, 28% más. En pollo entero la brecha es similar, porque se había acordado en $ 14 o $ 15 el kilo, pero hoy lo venden a $ 18 o $ 19.

Más casos: el zapallo anco, pactado entre $ 3 y $ 8 el kilo, se encontró a $ 13,90 en Coto y Carrefour, y a casi $ 10 en Disco, Vea y Walmart (hasta 236% más). La brecha va del 17 al 186% en papa y llega al 275% en limón, porque Walmart y Jumbo lo “congelaron” a $ 8, pero ahora lo venden a $ 20 y $ 30.

Y si hallar los ítems más baratos del listado fue siempre difícil, hoy el faltante es regla a cualquier hora. Pasa con artículos como el kilo de azúcar de $ 2,80 o el kilo de arroz a $ 3, el Yogurísimo firme de $ 1,99, el litro de Cindor de $ 6 o el de lavandina a $ 2,70. Ya nunca están.

A este escenario se le suma la aceleración de los incrementos por fuera de los 500 “congelados”. En 30 días, la canasta de 50 artículos que Clarín releva mes a mes en locales porteños de Coto, Disco, Vea, Walmart y Carrefour pasó de costar $ 724,24 a $ 781,47: se encareció un 7,9% promedio, impulsada en especial por carnes y varios productos de almacén.

En yerba, el total de las marcas ya subió más del 50%. Las Taragüí y Unión relevadas pasaron, en un mes, de $ 19,25 a $ 30 promedio el kilo. Y también en fideos secos hubo mucho salto. En Carrefour, los Favorita terminaron a $ 5,73 en septiembre, a $ 7,05 en octubre y a $ 8,25 en noviembre: 44% en dos meses. Los Terrabusi, en tanto, saltaron en noviembre de $ 7,49 a $ 11,69 en Disco (56%) y de $ 6,40 a $ 9 en Walmart (41%).

También se destacaron las subas en arroz de caja (18% promedio), polenta (13%), pan lactal (11%), mermelada (11%) y huevos blancos (10%). En bebidas, el agua mineral se encareció 19%, la saborizada 14% y los jugos en polvo 10%. La leche subió otro 6%, y hubo nuevos retoques en queso crema (8%) y manteca (7%).

Una sorpresa estuvo en la papa, que llega a venderse a $ 15,99 el kilo. Y el tomate quedó en $ 19,50 promedio, muy lejos de los $ 4 que el Gobierno había prometido que costaría “hacia Fin de Año”.

“En noviembre la inflación se aceleró, consolidando la tendencia observada en los meses previos. Y en la última semana del mes la variabilidad de precios fue récord”, destacan en la consultora Elypsis.

Lo que se preguntan analistas es si, con la aceleración de las subas, el sector no está formando un “colchón” para que el nuevo acuerdo de precios, que ya se negocia, comience con un piso más alto.

Fuente: Clarín