Algunos casos ya se implementan en tramos del canal Céspedes y el Arroyo Salcedo, ubicados en Maipú y Guaymallén. Estas experiencias de revestimientos implican menor costo y alta eficiencia.

Atravesando el cuarto año consecutivo de emergencia hídrica, el Departamento General de Irrigación junto a las Asociaciones e Inspecciones de Cauce, trabajan en la optimización de la distribución del agua. Con este propósito, se aplican en las redes terciarias y cuaternarias del sistema, nuevos métodos de impermeabilización de cauces que implican menores costos y un alto rendimiento.

En el canal Céspedes, ubicado en Rodeo del Medio, Maipú, se aplicó el método de bateado en la hijuela Dunit Nº3, ramo cuaternario del cauce. En la hijuela se procedió al revestimiento de 238 metros de cauce a través de la técnica del bateado. Esta técnica, de bajo costo y alto rendimiento, consiste en primer lugar en realizar una excavación y extracción de vegetación, para proceder luego a dar una forma al canal a mano (perfilado), en sección transversal, dejando así el cauce en condiciones para la impermeabilización. El paso siguiente es la instalación de una malla de hierro de 4,2 mm, de fácil instalación el que luego es rellenado con hormigón H-17, el cuál puede ser colocado con bajo asentamiento.

Con respecto a la elección de la técnica de bateado para impermeabilizar la hijuela Dunit N°3, Mario Sicre, inspector de Cauce del canal Céspedes Unificado, destacó: “esta zona tiene muchos resumideros, entonces el agua se escurre allí y se pierde. Tener esta obra hecha es la diferencia entre regar y no regar. Teníamos que cumplir dos requisitos: hacer la impermeabilización y con un bajo costo. El bateado es lo que hemos encontrado con menor costo y nos ha dado buenos resultados. Mendoza tiene muchos kilómetros de canales y evidentemente es costoso impermeabilizarlos a todos, por eso se trata de buscar alternativas”.

La técnica del bateado, también se aplicó en derivados del arroyo Salcedo, específicamente en la Rama 9, red terciaria de ese cauce, ubicado en Corralitos, departamento de Guaymallén. Allí se trabajó en 200 metros del canal, que a raíz de las condiciones que presentaba su suelo precisaba evitar las pérdidas de agua por infiltración.

Alejandro Currenti, inspector de Cauce del canal Vertientes Corralitos Unificada, explicó: “Apostamos a un sistema de revestimiento con significativamente menores costos respecto a los tradicionales. Los resultados que hemos obtenido con el bateado son óptimos ya que no perdemos agua, la podemos distribuir en mayor abundancia y llegamos a los regantes con el caudal que cargamos”.

Por su parte el superintendente General de Irrigación, José Luis Álvarez, destacaba lo que representa para el DGI, trabajar en este tipo de obras de menores costos: “Un concepto que sostenemos fuertemente, es asumir el desierto y esto implica un cambio de conciencia ciudadana y una búsqueda permanente de distintas alternativas con el objetivo de realizar un uso más eficiente del agua. Como parte de nuestro Plan Agua 2020, trabajamos en el mantenimiento de cauces, modernización de la red hídrica y también en el análisis de distintas técnicas, que nos permitan realizar obras que prioricen la eficiencia hídrica”.