Tal como se preveía, el PJ logró la media sanción de la norma para los impuestos provinciales con el apoyo del PD y los monobloques. La UCR votó en contra. Hubo unanimidad para avalar la norma sobre las propiedades.

Las leyes financieras avanzan hacia el Senado. Mientras Avalúo cosechó la unanimidad, más trabajo para el oficialismo resultó Impositiva, a la hora de conseguir los consensos con la oposición. Así, el radicalismo se mantuvo en contra porque considera que el proyecto enviado por Francisco Pérez es un «impuestazo». Pese a todo, el PJ consiguió el apoyo del PD y los monobloques para sacar la media sanción. 

Las negociaciones durante la jornada -que incluyeron al ministro Marcelo Costa y a su equipo de Hacienda en la Casa de las Leyes, con la calculadora en la mano- se concentraron en la posibilidad de modificar las alícuotas en determinados rubros, luego de que el oficialismo «abriera» el proyecto y aceptara modificaciones. Pero hubo un techo. El PJ se mantuvo firme ante la propuesta del rebalanceo impositivo solicitado por los radicales como condición para levantar la mano a favor.

Finalmente, con el apoyo del resto de los partidos de la oposición -el Partido Demócrata, los monobloques de Daniel Cassia, Patricia Gutiérrez y Néstor Piedrafita-, se aplicó la mayoría simple e Impositiva salió por 29 votos contra 17 y dos ausencias -la del diputado radical Edgardo Pinto, porque su mujer se encuentra internada en terapia intensiva, y la del justicialista Gustavo Arenas-. Pero también las dos diputadas del bloque Leandro Alem, las radicales Liliana Vietti y Teresa Maza, votaron a favor, tomando distancia del resto de los radicales.

El nudo de la discusión: Ingresos Brutos

El Gobierno provincial envió a la Legislatura un proyecto que, en el rubro de Ingresos Brutos, no presentaba modificaciones, según explicó el ministro Marcelo Costa cuando presentó la ley. La aclaración no era menor. El año pasado, precisamente, los valores de las alícuotas de la ley todavía vigente habían tenido un incremento importante. Con todo, desde el arco opositor demandaban por cambios puntuales.

El radicalismo sostuvo desde el principio que, como se trataba de la misma base que en el proyecto 2013, la ley Impositiva era un «impuestazo». Como contrapartida, pidió un rebalanceo que implicaba bajar ingresos brutos para el comercio mayorista y minorista, las pymes, monotributistas, gastronomía y turismo, agroindustria y construcción.

«El sistema es regresivo», apuntó Roberto Infante y agregó que «se sigue castigando a la producción y a los mendocinos, porque Ingresos Brutos es el impuesto que más incide en las casas».

El radical insistió en apuntar al gasto público generado por la actual gestión, al que consideró como «ineficiente», una crítica que el radicalismo ha remarcado desde todos sus flancos. «Seguimos con los bolsones de ineficiencia en el Estado Seguimos con serias deficiencias en Seguridad y en Salud», indicó. Y luego se preguntó: «¿Dónde está la plata, en qué se gastaron los recursos?».

El PJ se mantuvo firme y Jorge Tanús señaló que el mencionado rebalanceo «era inviable», ya que implicaban un «inconveniente financiero serio para la provincia». Con los números por cada rubro, el presidente de la Cámara Baja explicó que aceptar las reducciones pedidas por los radicales daba como resultado una baja en la recaudación de 960 millones de pesos, aproximadamente. Y que de haber aceptado, tendrían que haber ajustado en los valores de otros impuestos para equilibrar la recaudación.

«Esos mil millones son necesarios recaudar para no agrandar el déficit», sintetizó Tanús en su respuesta a Infante. Además, agregó que esa suma podría resentir los servicios públicos y llegó a equiparar esa cifra con el sueldo de diciembre y el aguinaldo. «Esa reducción implica también una reducción de la coparticipación municipal», subrayó.

Por su parte, la radical Vietti justificó su apoyo a la ley señalando que esa misma postura había tenido un año antes, cuando se trataba la ley vigente. Y que esto ya estaba pautado en el bloque radical desde hacía una semana y sin conflicto. Pero fundamentalmente, porque consideraba que los valores propuestos por los radicales a través del rebalanceo no implicaban una gran diferencia con los pautados en el proyecto oficial.

En tanto, Aldo Vinci -PD- aseguró que apoyaban la norma porque el PJ aceptó reducir, por ejemplo, las alícuotas de servicios turísticos en Ingresos Brutos. Además, lograron que las vasijas vinarias no sean consideradas en el impuesto Inmobiliario. Los demócratas también votaron en contra de la ley de sellos.

«Es un acto responsable acompañar esto. No es un impuestazo, las tasas retributivas tienen un aumento del 25 por ciento, que es la inflación que calculamos y no ha habido grandes variaciones en las alícuotas de Ingresos Brutos», explicó Vinci, para dar cuenta por qué cerraron filas con el oficialismo.

Avalúo por unanimidad

Con el consenso de todos los bloques, Diputados también dio media sanción a la ley que fija el valor de las parcelas e inmuebles en la provincia de Mendoza.

Como aportes, Avalúo 2014 incorpora el gravamen a las casas con pileta, lo que incrementa el valor de estas propiedades. Además, se incorporaron unos 140 barrios privados a la base catastral, que hasta este año pagaban tasas como barrios comunes. Y, como tercer punto, se incluirá en Catastro unos 2 millones de metros cuadrados de lotes y construcciones que estaban de manera clandestina, y que a partir de ahora comenzarán a tributar.

A modo de crítica tras el aval, desde el PD y la UCR resaltaron la necesidad de modernizar los sistemas de registro para afinar la inteligencia catastral y reducir el nivel de evasión con información más actualizada del desarrollo inmobiliario en Mendoza.

Fuente: El Sol