Parecía que Lenovo ya había cerrado el año con sus presentaciones pero se guardaba algo más para el final. Siguiendo su filosofía de convertibles nos llega ahora en formato Android pero sin ser un portátil como el Lenovo A10.

Bajo el nombre Lenovo Yoga Tablet la compañía china decide desmarcarse un poco del clásico factor forma del tablet para, de forma muy sencilla, introducir tres formas de usarlo sin necesidad de mecanismos complejos.

Yendo más allá del rectángulo

Lenovo lleva un par de años haciendo hincapié en la importancia del diseño y en cómo este factorinfluye en la forma en la que usamos un dispositivo. Lo hemos visto con los convertibles Yoga y ahora nos llega en formato en formato tablet con Android.

 

Con un cuerpo fino de 3mm en la parte más fina, nos encontramos con un cilindro (21,5mm) en el otro extremo del tablet que sirve de agarre y para situar el puerto jack y el botón de encendido.

En su interior, un procesador Mediatek 8389 de cuatro núcleos a 1,2GHz se encargará de dar potencia junto a 1 GB de RAM a Android 4.2, actualizable en un futuro a Android 4.4 según Lenovo.

La pantalla presenta dos tamaños, por un lado 8 pulgadas y por otro 10 pulgadas, ambos con la misma resolución: 1280×800 píxeles y un ángulo de visión de 178 grados de visión. La memoria interna es de 16GB pero podremos ampliarla con tarjetas micro SD.

Con una cámara de cinco megapíxeles en la parte trasera y 1,2 en la frontal no parece que vayan a ofrecer gran cosa pero en principio se antoja suficiente para el tipo de fotografías que vamos a tomar con un tablet. En el apartado musical, nos encontramos altavoces estéreos con la tecnología de Dolby.

La batería, según Lenovo, nos ofrecerá una autonomía de 18 horas de uso en el modelo de 10 pulgadas ya que cuenta con 9000 mAh. El modelo de 8 pulgadas este componente se queda en 6000 mAh.

Fuente: Xataka