«Recién me recibía de maestro en la escuela Normal de San Rafael cuando mi preceptora de 5° año a pedido de su esposo de buscar un joven que supiera escribir a máquina para cubrir una vacante en Tribunales, me propuso. Sin proponérmelo empecé a trabajar como auxiliar y a conocer abogados y jueces, y empezó a gustarme abogacía», relató a Los Andes en su estudio.

Así comenzó a viajar a Córdoba donde empezó a estudiar primero Procuración en calidad de alumno libre, y tiempo más tarde, Abogacía.

«Si bien yo trabajaba relacionado al Derecho Penal, cuando estudié comenzó a atraerme el Derecho Civil. Por eso al recibirme me dediqué a él. Cuando uno estudia para la facultad lo hace para aprobar pero al trabajar, si uno quiere hacer un trabajo responsable, debe estudiar mucho más aún. Así descubrí dos materias que llamaban poderosamente mi atención, que constituyeron toda mi vida profesional, o sea una especie de vocación: una es el Derecho Procesal Civil y la otra es el Derecho de Aguas», contó.

En este último tema, tan cotidiano en nuestra provincia que debió ganarle al desierto aprovechando el recurso hídrico, Guarino Arias conoció a grandes profesores como Joaquín López o el doctor Guillermo Cano, y otros juristas especialistas como Miguel Mathus Escorihuela, entre otros.

«Así llegué a estudiar el Derecho Procesal y hace unos años terminé de escribir unos libros -seis en total- de comentarios al Derecho Procesal Civil de Mendoza», afirmó. Estos libros se utilizan como textos de estudio.

Además de diversas monografías y trabajos sobre Derecho de Aguas, el último es un libro que se llama «El cambio climático y de emergencia hídrica. Causas, efectos y soluciones», declarado por la Cámara de Diputados de Mendoza como texto educativo. «No tengo un interés económico en los libros pero la gran satisfacción que uno recibe es verlo publicado».

En forma paralela, durante los últimos 50 años actuó como procurador primero, luego como abogado, ejerciendo la profesión libre, sin tener actualmente cargos públicos ni pertenecer a partidos políticos. Es miembro de la Academia de Ciencias Jurídicas y Sociales de Cuyo, como también de su par de Córdoba. Como consecuencia, fue designado como secretario de la sede San Rafael de un instituto de Derecho y Ciencias Sociales (que posee cinco secretarías), y al poco tiempo fue designado vicedirector.

En 2012 el Colegio de Abogados decidió crear un Instituto de Derecho Ambiental y Guarino Arias fue denominado primer director organizador del mismo. «Estudiamos las normas que regulan la actividad del hombre frente al medio ambiente desde el punto de vista del derecho».

En cuanto al Derecho de Aguas, Guarino Arias es socio y fundador de Iplea (Instituto Privado de Legislación y Economía del Agua). «Soy un crítico del tema del Atuel con La Pampa. Propusimos hace años un anteproyecto que plantea el trasvasamiento conjunto de aguas de la cuenca del Colorado con destino al sur de Mendoza y al noroeste pampeano». Explicó que La Pampa debe aprovechar los cupos de agua del río Colorado. «Pueden hacer lo mismo que se hizo en Mendoza y así podríamos conseguir una gran integración del centro del país».

Fuente:  Diario Los Andes Daniela Larregle