Miles de metros cúbicos de basura son retirados anualmente de los cauces provinciales. Así, los residuos sólidos urbanos se convierten en uno de los principales obstáculos que debe enfrentar el Departamento General de Irrigación al momento de mantener en condiciones el sistema de riego mendocino. Por ejemplo, en lo que va del 2013 ya se retiraron más de 192.000 m3 de basura en los canales pertenecientes a la cuenca del río Mendoza.
Ante esta situación, desde el año pasado Irrigación promueve el programa “Ciudadanos del Agua” como parte del Plan Agua 2020. El objetivo es generar conciencia y formar ciudadanos responsables en relación al recurso hídrico.
Durante más de un año, docentes y alumnos de escuelas secundarias de toda la provincia, trabajaron elaborando un proyecto de ley que establece derechos y deberes respecto al buen uso del agua y a la contaminación del recurso. El mismo será presentado el próximo martes, 20 de agosto, ante el Gobernador de la provincia, Francisco Pérez, en un acto que se realizará en el Auditorio Ángel Bustelo.
José Luis Álvarez, superintendente General de Irrigación, destacó: “El arrojo indiscriminado de los residuos sólidos urbanos en los cauces llamó la atención de los jóvenes mendocinos que entendieron el valor de un recurso tan escaso como es el agua en Mendoza. Es sumamente enriquecedor ver el compromiso de estos estudiantes que, desde el inicio del programa, generó un importante intercambio de ideas primero en sus escuelas, luego a nivel departamental y hoy a nivel provincial, trabajando codo a codo en la elaboración de un proyecto de ley”.
El proceso
La iniciativa fue gestada y guiada por el Departamento General de Irrigación, junto a la Dirección General de Escuelas, a través del programa del DGI “Ciudadanos del Agua”. Alumnos de escuelas 52 secundarias, representantes de los 18 departamentos mendocinos, trabajaron durante 9 meses en la planificación primero de proyectos zonales y luego departamentales, vinculados al recurso hídrico.
Para la puesta en marcha del programa fueron los supervisores escolares quienes eligieron, por departamento y según sus perfiles, escuelas de educación secundaria de las cuatro modalidades. Bajo esta premisa seleccionaron una escuela secundaria privada, un CENS de jóvenes y adultos, una escuela secundaria orientada y una escuela secundaria técnica.
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