El Departamento General de Irrigación, junto al Banco Mundial y la FAO (Organización de las Naciones Unidas Para la Alimentación y la Agricultura), organizó un seminario para el intercambio de experiencias referidas a la planificación estratégica de las cuencas hidrográficas. Este simposio forma parte de un convenio entre el DGI y la FAO, cuyo objetivo es financiar estudios y proyectos en materia de desarrollo agrícola.

“Atravesamos un momento trascendental en la gestión del agua en Mendoza, que es enriquecido con el intercambio de experiencias en materia hídrica, posicionando al agua en las discusiones estratégicas. La provincia ha recuperado el liderazgo en estos aspectos, el que se reafirma en esta etapa de planificación y cambio, que encaramos a través de la puesta en marcha del Balance Hídrico, inserto en los criterios de eficiencia del Plan Agua 2020”, destacó el superintendente General de Irrigación, José Luis Álvarez, al inicio de su exposición.

Durante el seminario Modelación y Planificación por Escenarios de Cuencas Hidrográficas, realizado en el Colegio de Ingenieros y Geólogos de Mendoza, se contó con la presencia de expertos internacionales, como Erwin Denys, quien realizó una evaluación de impactos del cambio climático en los recursos hídricos, a través de estudios realizados en el Nordeste de Brasil. También participó Jorge Escurra, quien explicó casos de estudio sobre el uso de WEAP para manejo integral del agua subterránea (casos de Nepal, India y Etiopía).

Entre otros disertantes, se contó además con la presencia de Cristian Rodríguez, jefe de la división de Estudios y Desarrollo de la Comisión Nacional de Riego (CNR), quien expuso sobre la aplicación de modelos de riego en el país trasandino.

“Es una decisión importantísima la que ha tomado la provincia a través del Departamento General de Irrigación, para estudiar las cuencas hidrográficas, estudios específicos para el Balance Hídrico. Vemos como muy necesario estos encuentros, donde se analizan distintos escenarios y modelos ya aplicados con buenos resultados en el mundo. Mendoza se consolida a su vez como referente internacional”, decía Luis Loyola, Oficial de Apoyo en Inversiones para la FAO.

En cumplimiento de distintas normas legales, que exigen un conocimiento de la disponibilidad hídrica, aspectos normativos constitucionales, Irrigación saldará una deuda histórica, como es la realización del Balance Hídrico provincial. El balance, implica la realización de estudios específicos para conocer el estado de cada cuenca y a partir de allí, poder determinar un eficiente equilibrio entre oferta y demanda hídrica. “Uno de los desafíos más importantes para esta planificación que emprendemos, será la recuperación de caudales, trabajar sobre una realidad climática adversa, donde nos encontramos en una situación de emergencia hídrica. Entre todos los sectores de la comunidad, debemos colaborar para aumentar la eficiencia en el uso del agua”, decía el Superintendente General de Irrigación.

Actualmente, Irrigación trabaja en Balance Hídrico sobre la cuenca del río Tunuyán Superior.  “El crecimiento de Mendoza está suscripto al agua, a la forma en que la administremos, por ello debemos pensar estratégicamente en la gestión integrada de los recursos hídricos, trabajar en mejorar la eficiencia en el riego y en los demás usos del agua. La posibilidad de generar más trabajo para los mendocinos, de ver una Mendoza con su frontera productiva ampliada, atender la problemática del uso deficiente del agua, todo estos aspectos tiene en cuenta el Plan”, destacó finalmente José Luis Álvarez.