El rebote registrado en el segundo trimestre del año no alcanza para festejar: los analistas prevén que este año el PBI crezca cerca de 3% y la inflación 26%, con perspectivas más desalentadoras para 2014.

Según el relevamiento de FocusEconomics (publicado en la página web www.focus-economics.com), los números del segundo trimestre terminaron de confirmar una mejora en las expectativas, lo que derivaría en un crecimiento de 3,6% este año. La cifra, ubicada por debajo de la proyección oficial, alcanza como para que el Gobierno pague en 2014 el cupón del PBI, con US$ 3000 millones de las reservas, a los acreedores privados.

Aunque el informe de la publicación LatinFocus Consensus Forecast publicado ayer presenta una mejora de 0,3% respecto de la del mes anterior, existen fuertes divergencias entre los diferentes pronósticos: la Fundación Capital menciona un 2,3%; HSBC, un 2,5%, y Bradesco, 2,8%. Del otro lado, el Galicia prevé un 5,4%, y JP Morgan, 5,3%, por encima de las propias estimaciones oficiales.

«Los recientes indicadores económicos pintan una visión positiva de la economía argentina. La actividad económica se expandió 7,8% en mayo, su tasa más alta desde octubre de 2011», se expresó.

La descripción se ajusta con la euforia que predominó entre los analistas privados y los funcionarios respecto del segundo trimestre: un alto crecimiento económico con alto consumo y muy buenas cifras en el sector automotor. La percepción comenzó a cambiar a partir del mes pasado, porque la comparación con 2012 ya no resulta tan favorable y porque las perspectivas externas ya no lucen tan dulces (peores perspectivas para la cosecha y para el mundo emergente).

Por esta razón, los propios bancos y consultoras que participan de este relevamiento prevén que el crecimiento del año próximo baje a 2,6%, aunque los bancos HSBC y JP Morgan son más escépticos, con cifras de 1% y 1,5%, respectivamente. La tendencia es inversa respecto de la inflación real: los analistas creen que terminará en 26% este año y en 28,9% el próximo.

Eduardo Levy Yeyati, director de Elypsis e investigador asociado de la Brookings Institution, dijo a LA NACON que «aunque el segundo trimestre fue bueno por la cosecha y el consumo, ahora la demanda decayó, el blanqueo no funciona y la perspectiva no es buena de cara a 2014 en términos de la cosecha».

Por esta razón, Elypsis estima un raquítico aumento del PBI de 1% para 2014, con una inflación que, al menos, se situará en 26%, pero que podría acelerarse.

Con el promedio de los economistas proyectando un dólar oficial a $ 5,99 este año y $ 7,48 el próximo, Levy Yeyati dijo que «la devaluación, que está en 25% anualizado, seguramente se acelerará en los próximos meses».

En tanto, Fausto Spotorno, del estudio Ferreres, dijo que prevén un alza real de 3,2% en el PBI, aunque consideró que el Gobierno podría estirar esa cifra hasta 5%. Pese al resultado electoral de anteayer, Spotorno no espera un cambio en la situación de este año. «Ya está jugado, pero las complicaciones pueden aparecer en 2014, con menor margen político y menos dólares por la cosecha, lo que se reflejaría en un crecimiento económico de apenas un 1,8 por ciento», explicó.

En el Ministerio de Economía -donde minimizan los rumores de un reemplazo del ministro Hernán Lorenzino- creen que habrá medidas para tratar de incentivar el consumo (mejora en las asignaciones familiares) y el mercado de capitales (bonos al estilo de YPF).