Asamblea Por el Agua – San Rafael, ha organizado una muestra de cine-debate sobre el primer documental argentino relacionada con la fractura hidráulica.

“Neuquén. Río Impetuoso”, tal como se denomina este documental, se proyectará el próximo lunes 15 en la Biblioteca Popular Mariano Moreno, a las 18hs.

 La fractura hidráulica ha alertado a las comunidades en diferentes puntos del país y el mundo, que se unen en la defensa sus bienes comunes, optando por ser ellas mismas que las generen el cambio que desean ver: un ambiente sano, el respeto por su autodeterminación y su derecho de elegir lo que quieren para sus vidas. Las comunidades vecinas de Tunuyán y San Carlos ya han logrado declarar sus municipios “libres de fractura hidráulica”, mientras otras ya han presentado su proyecto de ordenanza y se encuentra a la espera de una respuesta. Este es el caso nuestro, de San Rafael.

El modelo energético fósil-nuclear, del cual dependemos actualmente, está en crisis. El petróleo y el gas son recursos no renovables que comienzan a escasear. Tomar nota de esta realidad sólo nos puede conducir a una conclusión: debemos gastar menos y debemos desarrollar otras fuentes de energía menos contaminantes.

Muy lejos de solucionar el problema, buscando fuentes de energía renovables y limpias, los poderes económicos y los gobiernos nacional y provincial se empeñan en continuar con este modelo extractivista, saqueante y contaminante, el mismo que ha provocado esta crisis y nos hace dependientes de las potencias económicas mundiales. La nueva propuesta impulsada por los gobiernos es la extracción de hidrocarburos no convencionales, mediante la técnica de “fractura hidráulica” o “hidrofractura”, conocida también como “fracking”. Por eso la empresa YPF, ha decidido asociarse con algunas transnacionales como Chevron, Total Gas y Bridas para extraer petróleo en nuestro país.

La fractura hidráulica consiste en inyectar enormes cantidades de agua a mucha presión, mezcladas con arena y más de 600 sustancias tóxicas, en pozos o túneles subterráneos, destruyendo la roca dentro de la cual están encerrados el gas y el petróleo no convencionales. Para esto se utiliza grandes cantidades de agua que queda inutilizable, se contamina el agua subterránea, los ríos superficiales, el aire, la tierra y hasta se induce a la generación de movimientos sísmicos.

 El método de fractura hidráulica pondría en riesgo la salud de la población: contaminaría el agua que consumimos, la tierra en la que cultivamos nuestros alimentos, el aire que respiramos. Además, está en una etapa experimental, lo que potencia sus probabilidades de fallas, aumentando sus riesgos.

Recordemos que vivimos en un oasis artificial, y que nuestro bien más preciado, el agua, está empezando a escasear. San Rafael y toda la provincia se encuentran en crisis hídrica desde hace algunos años, con cortes de agua que afectan a las economías locales. En nuestro territorio, es impensable cualquier actividad que consuma grandes cantidades de agua sin que esto afecte directamente a nuestra comunidad. Por estos y otros motivos, rechazamos el modelo energético fósil-nuclear actualmente impuesto, como así también la reapertura de la mina de uranio de Sierra Pintada y la extracción de hidrocarburos no convencionales. En cambio, creemos que es importante invertir en la generación de energías limpias, seguras y eficientes.

La Asamblea por el Agua San Rafael, invita a la comunidad sanrafaelina a que tome parte en la construcción de su propio futuro.

Fuente: Asamblea por el Agua de San Rafael