Con el apoyo técnico del IDR, un inversor privado alquiló el local abandonado, compró ajo a 40 pequeños productores y comenzó a exportar a EEUU, Brasil y México.

Después de pasar más de 40 años en Estados Unidos, el gerente de ventas y marketing de Global Farmer’s Solutions, Domingo Zapata, regresó a Mendoza con la visión puesta en nuevas oportunidades de negocio y en generar fuentes de trabajo con un plan de desarrollo agrícola en su tierra natal.

“Vi la posibilidad de hacer algo acá y en setiembre del 2018 vine a ver el negocio, visitamos varios galpones y nos decidimos por este que es el mejor situado (Rodeo del Medio), en esta zona hay muchos pequeños productores a los que podíamos apoyar”, contó el inversor durante la recorrida que realizó junto a funcionarios de Ministerio de Economía, Infraestructura y Energía, que visitaron la empacadora.

El trabajo con el Institulo de Desarrollo Rural (IDR) consistió en acompañar el proceso de alquiler y relevamiento de pequeños productores dispuestos a vender su cosecha de ajo a un muy buen precio de referencia y de contado. “Nos brindaron toda la información previa que necesitábamos para iniciar el negocio y armaron reuniones con más de 60 productores”, relató Zapata.

 Actualmente, en el galpón empacador trabaja cerca de un centenar de personas en el proceso para el empaquetado que ya tiene destino a Estados Unidos, México, Brasil, mientras se hacen tratativas con otros mercados como el de Taiwán.

Si bien el contrato de alquiler se firmó por 4 años, el plan de desarrollo para  2019 consiste en plantar 500 hectáreas mediante un trabajo mancomunado entre el Estado provincial, los pequeños productores y el inversor privado.

El objetivo es ir conformando una cadena más amplia que genere nuevos puestos de trabajo mientras se amplía el horizonte exportador. “La idea es diversificar producto: puede ser en polvo, pasta, liofilizado o negro, para abrir nuevos mercados. El negocio es potable, expandible”, confió.