Cambiemos quedó a las puertas de anotarse el mayor logro parlamentario del año y probablemente de la era Cambiemos, la media sanción del Presupuesto para 2019, que a diferencia de los elaborados para 2017 y 2018 prevé un fuerte ajuste en todas las áreas del Estado para cumplir las obligaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI). El proyecto llegará al recinto de la Cámara baja este miércoles.

Para equilibrar el impacto de los recortes, en la sesión especial de ese día también se debatirán tres leyes complementarias al Presupuesto 2019, destinadas a aumentar la recaudación impositiva directa y por coparticipación de las provincias.

Una es la adenda del pacto fiscal del año pasado, firmada por 19 de los 24 gobernadores (no la firmaron el pampeano Carlos Verna, el sanluiseño Alberto Rodríguez Saá, la santacruceña Alicia Kirchner, el santafesino Miguel Lifschitz y el formoseño Gildo Insfrán); otra es la suba del porcentaje de inflación a partir del cual las empresas pueden realizar ajustes de Ganancias, y el otro es el aumento de los mínimos no imponibles y de las alícuotas de Bienes Personales.

El paquete presupuestario viene siendo negociado con extrema minuciosidad entre el Gobierno nacional, los gobernadores y los diputados desde hace por lo menos dos meses y llega a la recta final con cierta calma en el vendaval cambiario pero a la vez una contracción extraordinaria del consumo, una inflación muy elevada y una caída de la economía que provocó descontento en la sociedad y debilitó al gobierno de Mauricio Macri.

El Presupuesto 2019 prevé una caída de la economía del 0,5%, una inflación promedio de 34,8% y dólar a 40,10 pesos en promedio, y es fuertemente cuestionado por buena parte de la oposición. Pero Cambiemos logró el apoyo de la mayoría de los gobernadores y el miércoles tendría el número necesario para la media sanción.

El martes se reunirá por séptima y última vez la comisión de Presupuesto de la Cámara baja con el objetivo de firmar dictámenes sobre la ley de leyes. Los otros tres proyectos complementarios ya obtuvieron dictámenes el jueves pasado. Según un sondeo realizado por La Voz/Los Andes, todo el paquete presupuestario podría ser aprobado por entre 135 y 140 votos.

Posturas

El oficialismo, que tiene 107 diputados más el presidente del cuerpo, Emilio Monzó, contará con el apoyo de buena parte de los diputados del PJ, sobre todo de aquellos que responden directamente a sus gobernadores, como el salteño Pablo Kosiner, jefe del interbloque Argentina Federal, la principal bancada de la oposición dialoguista; o el entrerriano Juan José Bahillo o los chaqueños Juan Mosqueda y Elda Pertilé.

No es el caso del bonaerense Diego Bossio, quien anticipó que votará en contra, o de los pampeanos que responden a Carlos Verna, todos integrantes del Bloque Justicialista, que también preside Kosiner. Tampoco apoya las leyes presupuestarias el Frente Renovador, el espacio que lidera el ex diputado y ex candidato presidencial Sergio Massa, aunque no se sabe si votarán en contra o se abstendrán de votar.

El Frente para la Victoria ya anunció que lo rechazarán, al igual que otras bancadas opositoras, como el trotskismo y Unidad Justicialista, de los diputados puntanos que responden a los hermanos Rodríguez Saá.

A ellos se les sumarían los tres del bloque Evolución Radical, que lidera el porteño Martín Lousteau.

Fuentes parlamentarias dijeron a este diario que en el Gobierno están intentando atraer los votos de los dos diputados de Elijo Catamarca, que responden a la gobernadora justicialista Lucía Corpacci, y que la cordobesa Adriana Nazariotambién podría acompañar el paquete de leyes, al igual que sus comprovincianos del bloque Córdoba Federal, que responde al gobernador Juan Schiaretti: Martín Llaryora, Alejandra Vigo, Juan Brügge y Paulo Cassinerio.

Mañana, para ultimar detalles, los representantes de Cambiemos y de la oposición dialoguista volverán a reunirse. El objetivo de consensuar todos los aspectos del Presupuesto sobre los cuales aún hay diferencias y llegar a la reunión de la comisión del día siguiente con un texto definitivo para defender en el recinto.